¿Recuerdas el primer viaje de tu vida? Dicen que la experiencia de salir de casa por primera vez para descubrir un nuevo lugar queda guardada para siempre en nuestros recuerdos. Y si esa aventura implica un largo trayecto, aún más.
Coger un tren de esos que circula toda la noche -¿te acuerdas del Talgo?-, una aventura en barco por alta mar o esa curiosa sensación de vacío que descubres al coger por primera vez un avión y despegar. Seguro que lo recuerdas y si mientras viajas con tu mente hasta ese momento esbozas una sonrisa, eso significa una cosa: que te gusta viajar.
Ese buen recuerdo es lo que, seguramente, a lo largo de tu vida te ha impulsado a volver a viajar. Una y otra y otra vez. Cerca y lejos. A descubrir la Península y a conquistar nuevos continentes. Da igual a dónde, lo que importa es conocer, saber, aprender, explorar. Y a medida que creces tú, también crece contigo un ímpetu por descubrir nuevos rincones. Descubrir el mundo. Y te enganchas. Y no puedes parar. Y viajas una y otra vez. Y regresas y sólo piensas: ¿para cuándo el siguiente viaje? Si todo esto te suena, keep reading my friend, eres un espíritu wanderlust y este artículo esta hecho para ti.
O si no, para alguien que conozcas. Y es que cada vez hay más gente afín al movimiento wanderlust. Wan… ¿qué? Tranquilo/a, que no te suene no significa que no lo seas. Wanderlust significa pasión por viajar y es un préstamo lingüístico del alemán.
Y es que del mismo modo que dicen que los esquimales tienen más de 40 palabras para describir el blanco, los alemanes también tienen un amplio vocabulario para describir sensaciones, emociones y situaciones intraducibles a nuestro idioma (y con palabras muy graciosas). Wanderlust es una de ellas y su origen se remonta a la Edad Media, aunque no sería hasta 2015 que este vocablo ganaría una gran popularidad en nuestra cultura actual.
Serían primero los ingleses quien se la adueñarían y, después, se difundiría por todo el mundo. Pasó de ser un término desconocido a un lema internacional, protagonizando campañas publicitarias, movimientos de viajeros, películas de Hollywood y hasta inspirando el mundo del diseño a través de ilustraciones, producciones gráficas y hasta tatuajes.
